Madrid
Todavía no existe una cura para el cáncer, pero la inversión en investigación y la tecnología hacen cada día posible que muchos pacientes oncológicos puedan tener una mejor calidad de vida. Una pequeña empresa española es ejemplo de ello. Oncomatryx acaba de recibir 12 millones y medio de euros de la Unión Europea para el desarrollo de un ensayo clínico, a partir de un fármaco desarrollado íntegramente en nuestro país, que está logrando resultados muy prometedores en la lucha contra cánceres metastásicos donde el resto de tratamientos han fracasado.
Laureano Simón, doctor de Ciencias Bioquímicas y CEO de Oncomatryx, explicaba en que la novedad de este fármaco es su dirección: «No nos dirigimos al tumor en sí, sino a su microambiente». Este se compone por una barrera física que impide que las terapias convencionales no sean capaces de llegar al tumor y al mismo tiempo genera un ambiente inmunodeprimido que también impide que el sistema inmune del paciente no lo ataque.
Es en este momento cuando el fármaco de Oncomatryx actúa: «Entramos con una nueva generaciónde medicamentos que atacan este ambiente de forma limpia, específica y potente».
Las células que componen este escudo tienen un nombre: fibroblastos. Uno de los papeles que juegan estas células es la metástasis. «Son los primeros que emigran del tumor al torrente sanguíneo», aclaraba Simón. Una vez llega al órgano diana, los fibroblastos dejan la zona acomodada para que se adhiera el tumor. «Cuando atacamos a los fibroblastos, no solo atacamos al tumor primario, también a esos nichos metastásicos», continuaba el doctor.
Esta especie de escudo que protege el tumor fue descubierto por casualidad. «Lo que buscábamos eran marcadores para diagnosticar preventivamente el cáncer», contaba Simón en La Ventana.
Laureano Simón resaltaba que «los resultados más bonitos» han sido obtenidos en pacientes con cáncer de páncreas e hígado, en ambos casos con metástasis en hígado y pulmón. «Hay un grupo de personas que tienen una esperanza de vida mucho mejor», recordaba el doctor en bioquímica.
Además, este fármaco suele administrarse en aquellos pacientes en los que los tratamientos convencionales han dejado de funcionar. Los efectos secundarios son mínimos, por lo que «no es solo la prolongación de vida, sino prolongación con esperanza de vida», aclaraba Simón.
En algunos casos se ha llegado a revertir la metástasis en pacientes. Laureano Simón recordaba que esto sucedió «en un caso de metástasis hepáticas, que son las de peor pronóstico». Gracias al fármaco creado por Oncomatryx, este tipo de metástasis desapareció en la paciente de cáncer de páncreas. «Lo que queda es eliminar el cáncer primario del cuerpo», terminaba Simón.